La sucralosa es un edulcorante artificial que se utiliza en alimentos y bebidas bajos en calorías. Es aproximadamente 600 veces más dulce que el azúcar, por lo que se puede usar en pequeñas cantidades para lograr el mismo sabor.
La sucralosa se produce a partir de la sacarosa, el azúcar de mesa, mediante un proceso químico que sustituye tres átomos de hidrógeno por tres átomos de cloro. Esto hace que la molécula de sucralosa sea más estable y no se descomponga tan fácilmente en el cuerpo.
La sucralosa es acalórica, lo que significa que no aporta calorías al cuerpo. Esto la convierte en una opción popular para personas que están a dieta o que quieren reducir su consumo de azúcar.
La sucralosa es segura para la mayoría de las personas. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar efectos secundarios como náuseas, vómitos o diarrea.
También se ha planteado la preocupación de que la sucralosa pueda aumentar el riesgo de cáncer, pero no hay pruebas concluyentes que apoyen esta afirmación.
La sucralosa se utiliza en una variedad de alimentos y bebidas, incluyendo:
- Refrescos
- Zumos
- Cereales
- Productos lácteos
- Productos horneados
La sucralosa también se utiliza en algunos medicamentos, como los productos para la tos y el resfriado.